Cathie, Luis y Menorca con su luz y atardecer que enamora.
Agradecer a personas como ellos que me dejan ser participes de momentos tan especiales como lo son las bodas.
Menorca es sin duda una isla a la que volveré en cuanto pueda. Pasear por sus playas, calles y conocer a parejas así de simpáticas y buen rolleras es lo mejor de mi trabajo.
Espero que os guste este resumen de su reportaje.