¡Hola hola! Hoy os traigo otra sesión llena de sonrisas y felicidad. Nada mejor que una sesión de fotos para tener la excusa perfecta para pasar un rato divertido y guardar unos recuerdos tan bonitos como estos con nuestros amigos.
Aquí os dejo un pequeño resumen de la sesión de amistad que tuve el placer de realizar a Nerea y Ane, dos amigas que se quieren así tal cual son.
¿QUÉ PIENSAN ELLOS?
«Una experiencia apasionante. Esther está en todo, te guía, corrige la postura, te sitúa y, lo más importante, todo bajo un velo de confianza y naturalidad que parece que la conoces de toda la vida. En nuestro caso, mi pareja y yo, destacaríamos el contraste de colores y la variedad de enfoques de la que Esther dotó nuestra sesión. ¡Es súper paciente, comprometida e incansable! Mil gracias.»